miércoles, 21 de noviembre de 2012

El librero

Ser librero es como ser misionero, declara Edelmiro Fernández, sobre todo si trabajas para una librería con franquicias por todas partes. Yo sé que el Gran Librero Central está pendiente de mis resultados; espera que difunda la Palabra entre estos indígenas que se niegan a leer. Es una ardua tarea la que me ha sido encomendada, pero estoy determinado a iluminar esta parte del Virreinato y aumentar los beneficios un siete por ciento.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo los aumentaré un cinco por ciento. Pensé que en reinos tan paradójicos como estos, recibiendo un poco menos, ganaría un poco más.

Microalgo dijo...

¡¡Amén, hermano!!

¡¡Aleluya!!

Anónimo dijo...

??? joder,me parece que alguien se dejó de tomar la dósis! jajaja y otro ja más = 4 jas + jajaja pué q se yo? jolínes!que pa contá sin lacasítos de tó lo colorine,que no goloso!jajaja.
Me voy mañana a una reunion de ansianos en huelva,a unas 3 horita de mi siudá,venga que tengo mandra,pero es urgensia de ir,miren que de loco,no conosco sitio peor,pero hay que sé ma flessible y aseptá la gilipollés de otro desquisiao.Me vuervo el Sabadín porla noxe y estaré con ustede si dióo quiere q vuelva.
Solín me voy,eso sí,un hotelín de puta madre nos dan esta vé,lástima que mi mujé no tiene ni el alma de acompañarme al duelo,ya saben hombre,de noxe estoy vivo joer!pero ná,ni un besín ni lexe!que me voy como un cura a dieta no ápta pa coño,jajaja,un abraso a tó sin abrasá muxo como a lo pollo de last! jajaja,estan aquí esta noxe con tó lo gamberrete?

Microalgo dijo...

Hablando de no tomar su dosis.

Javier dijo...

¿No te acojona un poquito el comentario del segundo anónimo?