sábado, 20 de febrero de 2010

Y todo

Y me despierto con sabor a sangre en la boca y me pregunto si será una señal, si es la forma que tiene la muerte de contarme sus planes para mí o qué. Y no ha parado de llover en toda la noche. Y toda la mañana lloviendo también. Y yo escupiendo sangre en el cuarto de baño. Y yo cantando temas de los Smiths para pensar y no pensar en ella. Y yo leyendo a Cummings en una ciudad extraña. Y la cama vacía. Y el alma también. Y un poema a medias, en la mesa, mirándome con ojos acusadores, como si quisiera decirme que la vida es para otros y yo tengo unas obligaciones ineludibles.

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