viernes, 9 de diciembre de 2016

La noche

Uno se acuesta convencido de despertar a la mañana siguiente. La función continuará otro día más, pensamos. Pero realmente no hay garantías. Uno podría morir durante el sueño y no abrir nunca más los ojos. Quizá los perros sean más sabios que nosotros en esto, pues siempre despiertan llenos de alegría, como sorprendidos de seguir en el mundo.

1 comentario:

Microalgo dijo...

Sería la mejor manera de morir, no me diga que no. Esa, o que a uno le parta un rayo. Imagínese: PRTXXSS y ya. Y encima te lo manda algún dios, así que negocio redondo.