viernes, 11 de marzo de 2016

No son horas

Las cuatro de la madrugada; todo el mundo duerme, menos yo, que escucho a Neil Young con los auriculares puestos mientras intento escribir y fracaso. Aislado en la noche, donde nadie puede encontrarme y, menos que nadie, la inspiración.

1 comentario:

Microalgo dijo...

Escuche a Ligeti. No sé si se inspirará, pero dormirse se va a dormir seguro, y el campo de lo onírico es de lo mejorcito para inspirarse. Además, dormir le va a venir muy bien, que lo veo a Usted muy pálido.