martes, 12 de junio de 2012

Un triunfo de la voluntad

Mi abuelo era un tipo muy inteligente y con una voluntad de hierro: aprendió alemán estudiando un diccionario y así pudo cumplir por fin su sueño de visitar Berlín. Sólo sabía decir definiciones de palabras y todo el mundo lo tomaba por loco, pero eso no quita mérito a su esfuerzo.

1 comentario:

Microalgo dijo...

Y el fürer le copió el énfasis.