domingo, 10 de junio de 2012

Con la mirada

La primera vez que te vi, supe que íbamos a follar. Estas predicciones siempre se me dan bien, llámalo intuición femenina. Enseguida supe también que eras un hombre de culos, pues me mirabas a los ojos más de lo que estoy acostumbrada. Pensarás que no hay relación, pero sí: si tienes tiempo para apartar la vista de mis tetas y mirarme a los ojos es que eres un hombre de culos. La cosa completa es así: si no me mira a los ojos, es un hombre de tetas; si sólo me mira a los ojos, es homosexual; si me mira a las tetas, pero también a los ojos, es que es un romántico. Es una teoría mía basada en la pura observación (nunca mejor dicho). Los hombres de culos sois unos románticos porque parece que pensáis algo así: «un día esta chica saldrá de mi vida y esto será lo último que veré cuando se marche, así que voy a ir practicando».

1 comentario:

Microalgo dijo...

No aparenta ser muy optimista... ¿Qué hay de esos amores sempiternos, hombre?