lunes, 23 de marzo de 2009

La posmodernidad

«Lindo», me dice ella cuando nos despedimos, y me abraza con fuerza. «Qué bien te huele el pelo», dice después. «No dejes de pensar en mí», susurra, y me da un beso.
Yo le doy una palmada en el culo, le digo «hasta luego» y me marcho.

No hay comentarios: