jueves, 29 de junio de 2017

El ambigú

«Tienes que leer su novela, es divertidísima», le dice Isabel al poeta galardonado, pero éste no tiene el menor interés en mí y aprovecha esta frase para girarse hacia ella y decirle: «la que quiero leer es la tuya, a ver si me la mandas». Ya está, me digo, has vuelto a ser invisible. A pesar de que tendrías que destacar en esta fiesta elegante con tu camiseta de Star Wars arrugada. Pero a nadie le interesa tu novelita, desengáñate, no tienes nombre. Tu presencia aquí, rodeado de próceres y autores importantes, es una metáfora de tu lugar en el mundo literario. Aunque aquí al menos puedes emborracharte y hartarte de canapés, que lo pagan todo los honrados ciudadanos.

1 comentario:

Microalgo dijo...

No se fíe de los poetas laureados. Suelen ser unos ninfófilos.