martes, 5 de agosto de 2014

Mi editor

Conocí a mi editor el día de la presentación de mi libro. Lleno de optimismo, trajo desde Sevilla dos o tres cajas para las hordas de lectores que a buen seguro esperaban mi obra en Málaga. Sólo vendió cuatro ejemplares (y uno de ellos lo compró mi novia). Sin embargo, no se quejó y volvió a Sevilla con las cajas como si no hubiera pasado nada.
La siguiente vez que lo vi fue en Sevilla. Le dije que participaba en un acto en el que intentaría vender algún ejemplar de Órbita 76 y que quizá sería buena idea tratar de colocar alguno de Historia de la literatura secreta. Me preguntó la hora a la que llegaba y vino en coche a la estación de trenes a recogernos a José Pablo y a mí. Llevaba a su hija en el asiento trasero (estaba resfriada, por cierto) y me dio una bolsa marrón en la que esta vez había un número más razonable de libros: diez. Le di las gracias y pregunté si tenía que firmarle un albarán o algo así, pero me contestó que se fiaba de mí. Lo más bonito que puede decirte un editor, por eso me había publicado, porque era un hombre de un optimismo a prueba de bombas. Creo que esa noche vendí también cuatro ejemplares.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No está mal: es el 40% de la tirada XDD

¡El que la sigue la consigue! ¿Es ilusión o se trasluce cierto derrotismo en sus entradas? Le noto falto de fe (en lo suyo), y así no se puede ir muy lejos. Recuerde que con fe se pueden mover montañas, y sin fe no se puede ni caminar sobre las aguas, jeje. Mucho ánimo y a seguir currando. Por lo que a mí respecta, y a pesar de ser un anónimo, apostaría mucho antes por usted que por muchos escritorzuelos muy mediáticos y publicados, que proliferan como setas. Se lo digo sinceramente: creo que usted tiene talento, aunque no he leído nada suyo más que bastantes centenares de entradas de este blog.

Olvídese del éxito y del fracaso para siempre.
Que su victoria sea escribir al nivel que usted se haya propuesto.
Que su derrota sea no escribir nada, o no estar a la altura que espera de sí mismo.
Son sólo unos consejos, que espero le sirvan de algo.

Saludos de un antiguo y asiduo lector.

Microalgo dijo...

Beh. Ánimo.

El libro es bueno, desde luego.