sábado, 1 de marzo de 2014

2010

Me he despertado esta mañana pensando en el año 2010. Fue un año desolador en el que perseguí con denuedo la atención de cinco mujeres. En general no me hicieron gran caso, pero creo que fue Susana quien se portó mejor conmigo. Al fin y al cabo, se tomó no pocas molestias para verme (y tampoco le salió muy barato). Luego hizo mutis por el foro de manera inesperada y me pregunté durante bastante tiempo por qué. Supongo que fue algo que dije o hice. Llegué a plantearme incluso esta hipótesis absurda: quizá me dejé abierta la puerta de su coche en la estación de trenes, se lo robaron y me odió para siempre por ello. Pero no, una cosa así habría provocado una reacción visible. Tuvo que ser algo sutil, una falla grave en la personalidad que no logré disimular. Pero en 2010 estaba inmerso en pleno proceso de autodestrucción y no podía darme cuenta de esos detalles.

2 comentarios:

Pommette dijo...

¡ qué memoria, peque !

Microalgo dijo...

Fenómenos de isostasia: a mí el 2010 me vino de perlas.