—¡Puede que nos quitéis la vida, pero jamás nos quitaréis la libertad! —gritó. Los hombres de Carcer se miraron unos a otros, perplejos ante lo que parecía el grito de guerra peor pensado de la historia del universo. Vimes vio cómo movían los labios mientras intentaban encontrarle algo de sentido. (Terry Pratchett: Ronda de noche).
1 comentario:
—¡Puede que nos quitéis la vida, pero jamás nos quitaréis la libertad! —gritó.
Los hombres de Carcer se miraron unos a otros, perplejos ante lo que parecía el grito de guerra peor pensado de la historia del universo. Vimes vio cómo movían los labios mientras intentaban encontrarle algo de sentido.
(Terry Pratchett: Ronda de noche).
Publicar un comentario