Ella descubre la infidelidad de su marido y se siente ultrajada. El matrimonio tiene sus reglas y él las ha roto.
—¡Te has tirado a otra! ¡Has follado fuera del matrimonio! —le espeta.
—Es que si me hubiera follado a otra dentro del matrimonio, sería bigamia —responde él con calma.
—¿Qué?
—Y yo haré cosas inmorales, pero no ilegales. Uno tiene sus principios.
6 comentarios:
De lo que se trata es de marear al enemigo, está claro.
¿La infidelidad no es ilegal? Habría que revisar las cláusulas del contrato matrimonial...
Siempre girando la tortilla y luego las manipuladoras somos nosotras, no?
Besos!
las acusaciones de ella resultan muy cómicas
Creo que solte una sonora carcajada.
Primero porque la infidelidad, si es ilegal.
Y segundo, que podria decir un gran discurso sobre la infidelidad, pero solo dire, mira que hay que ser cortito de mente para cometer una...
Saludos y me paso mas seguido por aqui, estos textos son geniales!...
Desde la oscuridad. Honey Minage.
En algún país seguirá siendo ilegal, pero no aquí, desde luego.
No, no lo es. En absoluto.
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