miércoles, 14 de diciembre de 2011

La lengua madre

Los niños en las escuelas y guarderías de toda Francia comenzaron de pronto a hablar en alemán, para consternación de padres, profesores y políticos. Qué significaba esto, se preguntaban todos. ¿Era un nuevo método de invasión alemana? Si era así, era de admirar el pacifismo de la acción, declararon algunos, pero todos estaban de acuerdo en que era una forma de colonización cultural que no podía tolerarse. La cultura francesa estaba en peligro y algo había de hacerse. Los niños quintacolumnistas fueron inmediatamente conducidos a prisión, con la idea de reeducarlos y reinsertarlos en la sociedad y la cultura galas, pero todo fue inútil. Aprendían el francés, sí, pero lo hablaban con un marcado acento germano. Eran turistas permanentes, declaró el ministro de Cultura. Mientras tanto, el embajador alemán juraba una y otra vez que su gobierno no tenía nada que ver con el extraño fenómeno.

3 comentarios:

José Antonio Fernández dijo...

Yo cfreo que hablaban el Merkozy

Microalgo dijo...

El otro día escuché hablar a uno de Conil y me pareció que hablaba en esukera. ¡¡Dios!!

i*- La que canta con Lobos dijo...

jajaja opino igual: Merkozy!