Silvonia estaba decidida a convertirse en una potencia militar y para ello ordenó reclutar sólo soldados que fueran muy bajitos, pues las ventajas eran evidentes: hacía falta menos tela para los uniformes (y menos madera para los ataúdes), presentaban un blanco más pequeño para el enemigo y las trincheras se terminaban de cavar antes.
1 comentario:
Irrebatible. Además, los desfiles ibana ser cojonudos, porque los tanques parecerían enormes.
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