domingo, 25 de septiembre de 2016

Don de gentes

Yo siempre he preferido esconderme. Es mejor así, no tengo don de gentes, se me da fatal enfrentarme a los demás. Pienso ahora en muchas personas de mi pasado que no me tienen ni un ápice de simpatía. No resulto agradable, es preferible quedarme en casa y ampararme en la ficción, un reino en el que es más sencillo influir. A veces.

1 comentario:

Microalgo dijo...

Eso es porque se ha entrenado poco.