Mi padre actúa como si volver al hospital significara ingresar en él para morir, por lo que intenta evitarlo por todos los medios. «Si estoy en casa, seguiré vivo», parece pensar. Y se agarra a esta creencia con tanta fuerza que incluso llega a retrasar peligrosamente intervenciones clínicas.
1 comentario:
Lo entiendo... Aunque a veces no quede más remedio.
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