Encuentro una dedicatoria sentida en uno de los libros que he sacado de la biblioteca. Es un poco triste esto. Podría significar, por una parte, que el dueño del libro falleció y los herederos se deshicieron de sus pertenencias. Pero también podría ser que al obsequiado no le gustó el regalo y se desembarazó de él sin miramientos. En cualquier caso, es difícil imaginar una explicación bonita o alegre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario