El veintidós de diciembre de 1971, tras un fracaso comercial e incapaz de encontrar financiación para nuevos proyectos, Kurosawa se corta las muñecas y el cuello. Pero falla en su intento de suicidio y se recupera rápidamente de las heridas. Convencido de que quizá nunca dirija otra película, se refugia en la vida familiar.
En diciembre de 1973 parte a la Unión Soviética para rodar Dersu Uzala, película que se convierte en un éxito internacional y que gana el Oscar a la mejor película de habla no inglesa. Quizá un episodio menor en la Guerra Fría, pero de gran importancia en la vida de un ronin.
Publicado en el número 42 de Obituario.
2 comentarios:
Qué grande, el Kurosawa. Y qué majara (véase "los sueños", para apoyar esta tesis).
Genial !!!!!
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