jueves, 22 de septiembre de 2016

Controlar el futuro

Mi próximo proyecto será el que me salve. Y si no, siempre habrá otro. ¿Qué importa el desinterés de crítica y público? Hay que seguir insistiendo hasta que cambien de opinión.

1 comentario:

Microalgo dijo...

Las amenazas también surten efecto, en según qué ocasiones. Pruebe a ver. Ah, si se torna un supervillano con un láser en un satélite o algo (lo típico, vamos), hágame una favor y churrusque, a modo de maldad ejemplarizante, cierta isla que le diré por privado, para no levantar susceptibilidades. Nada, un viejo contencioso que tengo yo. Qué le cuesta.