lunes, 18 de julio de 2016

España

Entra Franco, gordo como un gorrino, y declara con voz viril de pito:
—¡Españoles! Dios me ha elegido por riguroso sorteo para guiar a nuestra patria a un futuro mejor, un futuro que sólo se puede encontrar en el pasado, cuando éramos un gran imperio. Como las tierras del mundo ya están ocupadas por otros, el imperio que levantaremos será interior, sobre los españoles desafectos que se arrojan a los brazos del contubernio judeo-masónico-marxista internacional. Los pueblos extranjeros nos contemplarán con la envidia que siempre los ha caracterizado y se agolparán a las puertas de nuestra patria para que los salvemos de la odiosa libertad que ofende al corazón cristiano. ¡Arriba España!

1 comentario:

Microalgo dijo...

Si lo dijera Usted en borma, hasta me reiría.