¿A qué hora te vas a levantar mañana?, le interroga ella. Él pregunta por qué quiere saberlo y ella le contesta que para levantarse a la misma hora que él y así, de esa manera, estar conectados a pesar de la distancia, empezar el día juntos aunque estén separados. Él sonríe y le dice que a las nueve. Y a las nueve suena el despertador de ella, que abre los ojos al nuevo día y se siente acompañada, aunque no sabe que en realidad él sigue durmiendo, pues en el último momento decidió que se despertará a las diez.
3 comentarios:
El detalle es lo que cuenta.
lo decidió en el último momento, y por si acaso silenció el móvil.
¡Traidor!
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