En el pasado, cualquier tribu habría decidido librarse de mí. Demasiado débil e inútil, prescindible para el bien de la mayoría. Quizá por eso sólo estoy cómodo con poca gente. No me gustan las multitudes. Yo quiero una tribu mínima, una que no pueda eliminar a ninguno de sus miembros.
2 comentarios:
A mí me ha pasado, en la práctica eso son dos personas.
Nah, los humanos hemos llegado hasta donde hemos llegado precisamente por no eliminar a los miembros que, desde un punto de vista meramente animal, no serían útiles. Luego, esos "inútiles" van e inventan la rueda, el arco, cómo mantener el fuego... y como ligan poco, la música, la poesía y la narrativa, a ver si pillan cacho.
(Otro punto de discusión diferente es definir "hasta dónde hemos llegado", pero no quiero extenderme demasiado).
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