viernes, 8 de mayo de 2015

Pecados capitales

—¿Cómo no confías en mí? Como decía Paul Newman, ¿por qué iba yo a comerme una hamburguesa por ahí teniendo un buen filete en casa?
—Pues por gula, claro.

1 comentario:

Microalgo dijo...

Las hamburguesas tienen su aquel. Cansan enseguida, eso sí.