lunes, 25 de mayo de 2020

Paternidades literarias

—¿Entonces estás contento con la novela o no?
—Digámoslo así: creo que es como si depositaras muchas esperanzas en un hijo y luego resultara un fracasado, que lo quieres igual aunque no sea lo que soñabas.

1 comentario:

Ikana dijo...

Pero una novela puedes cambiarla, y un hijo ya es otra historia