—Hola, nena, cuánto tiempo.
—¿Otra vez? Te he dicho que no me llames nunca.
—Tengo que hacerlo por motivos narrativos.
—¿Qué?
—El narrador ha de relacionarse con los personajes.
—Perdona, pero yo no soy ningún personaje tuyo.
—Todavía no, pero lo serás cuando escriba sobre esto
2 comentarios:
¿Será la forma de conocer mejor de dónde vienen y a dónde van esos personajes?
Saludos!
Y entonces podré imaginar una buena situación...
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