jueves, 26 de abril de 2012

Del ombliguismo en la literatura

Yo, damas. Yo, caballeros. Yo. Yo soy el alfa y el omega de esta breve charla en la que pongo el mundo de la literatura a los pies de los caballos del Apocalipsis. Porque yo soy el epítome de las letras universales. Fuera de mí no hay nada. No existe una historia de la literatura, a no ser que yo me la invente. No es posible el futuro si yo no lo pongo por escrito. Pero recuerden que yo no escribo para cambiar el mundo, pues el mundo soy yo y soy inmutable.

6 comentarios:

Bruno dijo...

Perfecto

Anónimo dijo...

me ha recordado a este relato:

http://eliseototo.blogspot.com.es/2008/11/el-solipsista.html

saludos

Anónimo dijo...

Amén.

:D

Sk

Advenedizo. dijo...

Epítome de frivolidad es lo que son la mayoría de los ultraegos que pueblan el panorama comercial, y también el alternativo, para qué engañarnos.
Un saludo.

Microalgo dijo...

... dijo el autor aunte una sala enorme en la que sólo estaban (y bostezaban) tres sin techo.

Microalgo dijo...

¿Aunte?

Esto de escribir con prisas me aniquila.